Directivos de “Cabo Norte” inauguraron la Casa Club para los residentes del complejo, en una ceremonia realizada el jueves 17 pasado por la noche, con lo que culmina la urbanización de la primera etapa del novedoso desarrollo inmobiliario.

Simultáneamente se puso en marcha el primer tramo de la “espina verde“, un sendero que conecta a todas las áreas de esta primera etapa, así como dos de los lagos del complejo, en los que se pueden practicar actividades deportivas, recreativas y de pesca.

En la inauguración de la Casa Club, que reunió a numerosos invitados, el director de GC Inmobiliaria, la promotora de “Cabo Norte”, Eduardo Gasque Casares, anunció también la apertura, en el primer trimestre de 2017, de Sports World —un club deportivo familiar, abierto al público, con piscinas, canchas de tenis, paddle y fútbol 7, pista de jogging, etcétera— así como de un nuevo plantel del Colegio Teresiano Enrique de Ossó.

Primero de su tipo

“Cabo Norte” es el primer proyecto urbano en Mérida diseñado bajo el concepto de “comunidad planeada” , es decir, un lugar donde sus residentes encuentran servicios, actividades y amenidades para cada etapa de su vida.

Se trata de un conjunto residencial con 40 “macrolotes“, con capacidad para albergar 4,000 viviendas en su conjunto, ofertado a los desarrolladores de vivienda residencial del país interesados en construir fraccionamientos dentro del complejo, con sus propias características de diseño, tamaño y precio.

Esta infraestructura incluirá el centro comercial La Isla, que tendrá 200 opciones de compra y entretenimiento, incluyendo cines, supermercado, tiendas departamentales, restaurantes, cafés, bancos, farmacias y feria de juegos mecánicos, cuya construcción está avanzada.

Como parte de esta primera de etapa de “Cabo Norte”, también se concluyó la construcción del “Gran Lago Principal“, de siete hectáreas y un kilómetro de largo, que tendrá un malecón en la parte posterior de La Isla. En este lago, como en el de la Casa Club, explican los directivos del complejo, se podrá pescar una variedad endémica de mojarra, practicar deportes acuáticos no motorizados y navegar en kayak y paddle board.

Ambos lagos ya están comunicados por medio de la llamada “espina verde“, un sendero para caminar y montar bicicleta, que atraviesa los parques residenciales y otras amenidades de la primera etapa del complejo.

La “espina verde” tiene plantas y árboles endémicos, como malangas, palmas, chaká, cedro y “pich“, que dan sombra en todo el camino y desalientan el uso del auto entre los residentes.