Rendirle culto a la muerte era algo común en la época prehispánica y que aún forma parte de la cultura mexicana. Cuando un ser querido fallece su cuerpo era envuelto en petate y sus familiares preparaban una fiesta para que su espíritu fuese guiado en su recorrido hasta Mictlán.
A su vez, los familiares le colocaban los alimentos que solía comer cuando se encontraba en vida, ya que tenían la creencia de que podía llegar a sentir hambre.
Para la cultura indígena el Día de Muertos era un día muy importante debido a que las almas de sus seres queridos regresaban al mundo terrenal para convivir con los demás familiares y nutrirse de las ofrendas que colocaban en el altar para mantener viva su memoria.
¿Cuándo se celebra?
El Día de Muertos se celebra en el mes de noviembre en los días 1 y 2 para honrar la memoria de los muertos, el primero de noviembre es conocido por ser día de Todos los Santos y el segundo día corresponde a los Fieles Difuntos, es decir aquellas personas que fallecieron en la adultez.
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Muchas familias preparan sus altares con flores de cempasúchil y ofrendas, comida, papel picado, calaveritas de azúcar, mole y pan de muerto. A su vez, se adornan con flores las tumbas y se colocan altares sobre las lápidas, ya que al hacer esto se piensa que ayudará a las ánimas a transitar por el buen camino luego de fallecer.
¿Que debe colocarse en el altar?
Existen algunos elementos que son imprescindibles para recibir a las ánimas durante la celebración del Día de Muertos y estos son los siguientes:
- Sal: el significado de la sal es la purificación evitando que el cuerpo se corrompa, y el espíritu del difunto pueda volver el año siguiente sin problemas.
- Agua: el agua representa la vida y se le coloca un vaso de agua como ofrenda para que calmen su sed por el largo viaje.
- Incienso y copal: los indígenas solían ofrecer copal a sus dioses, el incienso no era conocido aún en ese entonces. También era usado para limpiar el lugar de malos espíritus.
- Flores: las flores son un símbolo de festividad por sus llamativos colores y diversos aromas. Al adornar y aromatizar el lugar ayudan a que el ánima se marche contenta.
- Velas y veladoras: otro elemento importante es el cirio, y suele usarse en forma de veladoras, ceras, o velas. La flama representa la fé, esperanza y luz. Además de servir como guía para las ánimas en viaje de ida y vuelta.
El altar, día por día
Desde el 28 de octubre al 3 de noviembre se irá colocando una veladora junto a otro elemento que se colocó en el altar, como una flor blanca, un vaso con agua, pan blanco, fruta, e incienso hasta hacer el levantamiento de la ofrenda.
Cultura y tradición
Cada año en México se suele celebrar este importante ritual, y a su vez, logra atraer a muchas personas de diferentes países que vienen a participar en las festividades y conocer más sobre la cultura mexicana y tradiciones.
