Con el inicio de la primavera nada mejor que reinventarnos al igual que las estaciones y florecer cargados de energía. Por eso se nos ocurrió un roadtrip a Chichén Itzá para ver el equinoccio y compartirte algunos consejos para que visites el sitio durante estas vacaciones. ¡No olvides ver el vídeo en nuestras redes sociales!

Seguramente has escuchado hablar de la serpiente emplumada de Chichén Itzá y su descenso para anunciar el equinoccio de primavera; se trata de un espectáculo solar en el que a través de la luz y sombra se van revelando unos triángulos hasta llegar a la base de la pirámide donde se encuentra la cabeza de una serpiente. Según las creencias mayas, se trata del Dios Kukulcán quien al bajar a la tierra indica que se puede iniciar el ciclo agrícola.

El fenómeno se puede ver tres días antes del 21 de marzo y tres días después, y si no te gustan las aglomeraciones puedes optar por ir el 19 ya que el día principal acuden más de 13,000 personas. De igual manera puedes acudir durante el equinoccio de otoño el 21 de septiembre. Aunque la hora varía cada año, casi siempre es entre las 4:30 y las 5:00 p.m. que puede verse el efecto solar por completo, pero lo mejor será que llegues desde temprano a Chichén Itzá y así tengas tiempo para recorrer sus demás atractivos. Si no tuviste oportunidad de ir para ver el espectáculo, puedes aprovechar las vacaciones para darte una vuelta por ahí y disfrutar del Cenote Sagrado y el cenote Xtoloc, el Patio de las Mil Columnas, La Gran Plaza de las Monjas, El Observatorio, el Juego de Pelota y la Plataforma de Osario.

Algunos de los rituales que observamos durante nuestra visita fueron acudir vestidos en color blanco, quitarse los zapatos, pararse en paralelo al sol y abrir los brazos para recibir la energía, quema de incienso, posiciones de yoga y cantos prehispánicos.

Sin importar cuáles sean tus creencias sin duda te vas a emocionar con los aplausos o los gritos en coro cuando aparece y desaparece Kukulcán, una emoción con la que se rompen fronteras, pues pudimos observar a gente de todo el mundo reaccionando de la misma manera ante el llamado de la deidad maya.

Visita Dzibilchaltún

Otra opción, es acudir a Dzibilchaltún durante el amanecer, pues alrededor de las 5:50 a.m. el sol comienza a aparecer hasta situarse justo en el centro del Templo de las Siete Muñecas. A diferencia de Chichén, se trata de un fenómeno que no se da todos los años, como en esta ocasión que las nubes impidieron verlo. El sitio arqueológico se ubica 21 kilómetros al noroeste de Mérida y está abierto al público todos los días de 8:00 a.m. a 5:00 p.m. Únicamente el día del equinoccio es cuando se puede ingresar desde la madrugada. El costo general es de 65 pesos y los domingos es gratis.

RECOMENDACIONES

Toma en cuenta que el tiempo de transporte desde Mérida es de aproximadamente 2 horas.

Lleva bloqueador solar, gorra y repelente contra insectos.

El horario es de lunes a domingos de 8:00 a.m. a 5:00 p.m.

El acceso general es de 118 pesos.

Para utilizar cámara de vídeo debes pagar un derecho de 45 pesos.

Si no te gusta el sol, puedes optar por los recorridos nocturnos y el espectáculo “Noches de Kukulcán”.

Acude con zapatos cómodos.

Lleva botellas de agua para mantenerte hidratado.

No está permitido llevar tripie o selfie stick.