Francisco Bernés Aranda y Fabián Gutiérrez Cetina son la dupla creativa que conforma parte del equipo de producción de Workshop: Diseño + Construcción. ¡Conoce acerca de su estudio y sus proyectos en líneas siguientes!
Workshop, es un despacho joven de arquitectura ubicado en Mérida. Fue fundado por los arquitectos Francisco Bernés Aranda y Fabián Gutiérrez Cetina de manera simbólica en el año 2012, en 2014 se consolida formalmente y en 2016 se asocian con la arquitecta y el ingeniero Isabel y Alejandro Bargas. Desde entonces, han tenido la oportunidad de crecer y de involucrarse en varios proyectos comerciales, culturales, residenciales y de intervenir casas en el centro histórico meridano, mismos que han alcanzado proyección nacional e internacional al ser publicados en plataformas de todo el mundo.
En 2018 y 2019, “Casa que Canta” y “Filux Lab” respectivamente fueron finalistas en los Premios Iconos del Diseño, organizados por la Revista Architectural Digest México.
Con estos mismos proyectos, obtuvieron el primer lugar en las categorías de Interiorismo Residencial y Arquitectura Lúdica, organizados por la Asociación de arquitectos e interioristas de México.
En 2020, obtuvieron el primer lugar en los Premios Prisma en la categoría de Vivienda Habitación menor a 150 metros cuadrados con “Casa Sol”, mientras que el proyecto “Filux Lab” fue seleccionado como Finalista en la categoría de Arquitectura Pública en los Premios Firenze de Grupo Reforma, y obtuvo Mención Honorífica en la XVI Bienal nacional de arquitectura mexicana, en la categoría de Arquitectura Cultural por parte de la federación de colegios de arquitectos de la república mexicana.
El eje rector de su diseño se basa principalmente en el respeto por la naturaleza, el contexto y la historia, creando ambientes frescos y tropicales que se relacionen directamente con su entorno, siempre conservando la esencia del lugar en el que se desenvuelve.
“El objetivo más importante de la empresa es diseñar y desarrollar proyectos de los que nos sintamos orgullosos; es el poder reflejar en algo tangible como lo es un edificio, sensaciones de seguridad, confort e incluso felicidad. Es el hecho de lograr que el usuario se sienta realizado dentro de un entorno que fue diseñado específicamente para él”, señala Fabián.
“Para nosotros, la vivienda ideal es un espacio que transmita paz y tranquilidad, un lugar donde se disfruten cada uno de sus espacios, que respete la naturaleza y su entorno, y que se adapte a ellos. Que sea un punto de encuentro para familiares y amigos; y que promuevan el desarrollo integral de quien la habite”, agrega Francisco.
¡Gracias a Workshop por la entrevista!