El artista da nota de cómo encuentra en las artes visuales una manera de expresar sentimientos. Grafitis, signos de humedad, rótulos y grabados conforman su obra. Hoy presentará sus más recientes trabajos en el Lobby del Yucatán Country Club.
Hace 8 años, Jorge Patrón Le Doux descubrió en la pintura su vocación. “Tomé cursos con Jaime Barrera, Ariel Guzmán e Israel León. Lo dejé y pasado tiempo, agarré un lienzo y me puse a pintar cosas abstractas”, relata. En la búsqueda de una técnica propia, adopta la mixta. “Me interesan los muros viejos, que han retenido años y están repletos de humedad, a lo mejor con algún grafiti o intervención. Ahí tomo lo que considero puede ser el inicio de una obra interesante. La traigo a mi estudio y empiezo a hacer mi arte”, comentó. Jorge utiliza el Estrapo, técnica ancestral que consiste en sustraer obras de arte ubicadas en muros y volverlas transportables; puede ser parte de la pared en sí, las capas de pintura o aplicar un tratamiento especial para remover la obra completa lentamente con espátulas. Ubicado en un “loft”, el estudio del artista se encuentra lleno de “paredes” con personajes como por ejemplo Marge Simpson; todas interactúan con grafitis, rótulos y logotipos. Entre ellas están las obras que presentará hoy en lobby del Yucatán Country Club.
En el arte que se incluirá en la muestra destacan las figuras femeninas con rostros incrustados extraídos de cuadros de Velázquez. “En Cuba retraté mujeres y haciendo una analogía de las épocas colonial y actual, se me ocurrió ponerle caras de gente española”, comenta el artista, quien estuvo también en la Ciudad de México haciendo sátira política; ¿la técnica? “Street Art” o “Arte callejero”. Es este tema, junto con el arte pop, sobre los cuales gusta documentarse. Entre sus autores favoritos menciona a Pollock, Kooning y Tápies. Jorge ha participado en colectivas e individuales en lugares como el Makech y el Macay en Mérida, por mencionar algunas. También ha expuesto en el Instituto de Cultura de México en Miami y el Museo de Arte Contemporáneo de la Ciudad de México.
Donó las ganancias de una colección propia a la fundación “México Vivo”, que se dedica a ayudar a personas con SIDA. “¿Quién gusta de tu obra?”, “Gente de varias edades ha tenido buenos comentarios. En su mayoría canadienses y norteamericanos han comprado mis obras”, finalizó.
