Una pirámide maya es el eje principal del concepto de este restaurante, que ofrece comida internacional y se ha posicionado como uno de los favoritos para turistas y locales en Progreso. Un paseo por el malecón de ese puerto llevó a la familia Verdalett a detectar una oportunidad de negocio, fue así que nació “Maya Ka”, restaurante que sirve comida casual, con recetas y sazón familiar.

“Hace 5 años estábamos paseando y nos dimos cuenta que todo cerraba a las 7 de la noche y no había opciones para cenar, a pesar de que es la zona de playa más cercana a Mérida”, comenta Ángel Verdalett, uno de los propietarios.

Una pirámide de la cual desciende una alberca que representa al cenote, rodeada de mesas que son las casas del pueblo maya este concepto es el que inspira “Maya Ka”. Lo coronan lámparas como constelaciones y caracoles, elementos representativos de la relación de los mayas con la astronomía y el mar. El espacio busca que la gente viva una experiencia visual, a la par de la gastronómica.

“ Queremos que nuestros comensales salgan con un día para recordar y compartir, una de las satisfacciones más placenteras es cuando la gente que nos visita sale enamorada del lugar y de Progreso compartiendo el día en Maya Ka a través de sus diferentes redes sociales, mismas que nos permiten llegar cada vez a más gente de todo el mundo”.

El trabajo de la familia Verdalett con este tipo de lugares va de la mano con la de autoridades municipales, estatales e inversión privada de Progreso. “Maya Ka se suma al proyecto turístico y de desarrollo que atinadamente dirige el presidente municipal Julián Zacarías, el cual nos motiva a sumarnos a su proyecto y ser mejor cada día”, platica.

Sobre el diseño del lugar comenta que “al diseñar Maya Ka se buscó trasladar lugares mágicos ubicados en Tulum o playa del Carmen y consideramos que se necesitaba un motivador para quedarse en Progreso y no tener la necesidad de viajar de 3 a 4 horas fuera de Mérida. El éxito ha venido, y la pirámide de Maya Ka es uno de los lugares más fotografiados por el turismo en Progreso. Hemos sido sede de pasarelas, sesiones de fotos para catálogos de ropa de marcas reconocidas a nivel nacional e internacional. Nos han mencionado en revistas fuera de México, y aún falta mucho por hacer”, asevera Ángel.

No obstante, parte de este éxito considera que viene de la mano con la relación servicio-calidad, que tiene que ser de lo mejor, aparte de autotransformarse constantemente. “Lo que un cliente ve hoy, en unos meses encontrará un Maya Ka distinto, es parte de la magia del lugar”, puntualiza.

En cuanto a la gastronomía, Ángel asegura que buscan satisfacer a cualquier paladar siempre con el cometido de disfrute del mismo. “El menú es internacional, manejamos mariscos, aves, carnes, pastas, ‘snacks’ y sobre todo comida yucateca. Significa una gran alegría cuando el cliente nos felicita por concepto y alimentos. Eso nos motiva a brindar lo mejor de nosotros día a día, tanto que la familia cubre todos los puestos esenciales para el buen funcionamiento de Maya Ka. Si algún cliente está insatisfecho con el servicio de nuestros colaboradores inmediatamente buscamos la mejor solución a su problema. Uno de nuestros lemas de trabajo es tratar al cliente como nos gustaría que nos trataran”, comenta Ángel.

Se acompaña en el trabajo con sus hermanos Manuel, Eduardo, Lupita, Mauro y sobrina Valerya, todos bajo la supervisión de la matriarca de la familia, la señora Dulce María Ruiz viuda de Verdalett Ledanny. “Ella es el eje principal, la que guía, regaña, felicita y trata que todo marche como debe ser”, finaliza.

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