El empresario Manuel Albertos Peón, dueño de una de las franquicias de El Fogoncito, cuenta a Plan B cómo decidió ingresar al mundo de los restaurantes y qué le ha llevado a mantenerse en la preferencia de sus clientes durante ese tiempo.

La inquietud de emprender nació hace más de un año y medio tras haber colaborado durante 30 más en Grupo NICXA, el cual se dedica a operar varias franquicias de alimentos. El empresario eligió la comida mexicana como su giro por una razón de gusto y proyección: “porque los tacos son un delicioso platillo icónico reconocido en todo el mundo”.

El Fogoncito se encuentra ubicado en Plaza Altabrisa desde que ésta abrió sus puertas. La marca comenzó en Ciudad de México en 1968 y, además de encontrarse en Mérida, se ha expandido a varios estados de la República y hoy tiene presencia en otros países como Honduras, Costa Rica y Brasil.

“El giro restaurantero en sí es un reto muy importante ya que es primordial mantenerse en el gusto y agrado de nuestros clientes; como sabemos, la competencia en este giro es cada vez mayor, y eso hace que se vuelva bastante retador y nos obligue siempre a ofrecer los mejores productos con un excelente servicio”, reconoce el empresario Albertos Peón

También considera que una parte importante de su negocio es saber escuchar lo que los demás tienen que decir de su marca, ya que a fin de cuentas quienes toman la decisión de llegar a su restaurante son los mejores críticos. “La buena crítica siempre nos motiva y nos ayuda a exigirnos cada día más; y la mala crítica, considero que es necesaria para poder mejorar y crecer en todos los servicios que ofrecemos a nuestros clientes. De ella siempre aprendemos”, comenta.

Gracias a esas sugerencias, el restaurante ha tenido una evolución favorecedora en varios aspectos, como la tropicalización de los productos que hoy ofrecen. Sobre las personas que colaboran con él, afirma que siempre está trabajando en capacitacón y poniendo mayor atención en la actitud de servicio, ya que esto es algo que los distingue con sus clientes. Precisamente el servicio crea además un buen ambiente de trabajo, logrando que todos se enfoquen para lograr un mismo fin: la satisfacción de sus comensales.

Albertos Peón está orgulloso del desempeño y la magnífica actitud que caracteriza a todo su equipo de trabajo, empezando por su socio operador, la parte gerencial y todo el personal de operación que colabora en el restaurante, sin dejar a un lado a su hijo, quien es parte importante en la configuración del negocio. También está agradecido de contar con el respaldo de su familia, “el motor que me impulsa y motiva”.

“Siempre estamos trabajando, de la mano con nuestros proveedores para conseguir los mejores insumos y hacer que nuestros platillos cuenten con la mejor calidad posible, que es la que nuestros clientes esperan de nosotros”, señaló. Para Manuel Albertos Peón, la disciplina y organización son la clave para que cualquier proyecto logre salir a flote.

“Es muy importante saber organizar nuestro tiempo para poder equilibrar y balancear las tareas familiares, personales y laborales, de tal forma que les pueda dar a cada una el tiempo y la atención que requieren y que ninguna se contraponga a las otras”, afirma con decisión. Para finalizar, agradeció a todos sus clientes por la preferencia y lealtad que han dado a El Fogoncito durante estos años y adelantó que además de ofrecer tacos de pastor, gringas, guacamole, quesos fundidos, frijoles charros, sopa azteca y varios platillos de carnes como son las tablitas, los molcajetes, la arrachera Mérida, entre otros platillos, próximamente contará en su menú con una línea de deliciosos cortes finos.

Dirección: calle 7 # 451 local 44 Plaza Altabrisa.
Horario: Domingo a jueves de 12:00 PM a 11: 00 PM viernes y sábado cierra hasta las 12:00 AM
Telefóno: 9991679548 maneja Eventos de Trompo de pastor y parrilladas
Facebook: El fogoncito merida
Instagram elfogoncito_mid